Esta es la última entrada en la que resumo los capítulos del libro Espiritualidad: Un camino de transformación de Leonardo Boff. Les recomiendo este librito como una mirada crítica y global al tema de la espiritualidad.
10. La espiritualidad permite ver a Dios
Cuenta Boff un relato sobre su señora madre: mujer de once hijos y analfabeta. La describe él como «una mujer de una gran sabiduría existencial y profundamente piadosa» (p. 77). Boff acostumbraba grabar en audio sus escritos para que ella pudiese escucharlos. En una de sus grabaciones Boff hablaba sobre la experiencia de Dios y su madre le preguntó: «¿Tú ya has visto a Dios?». Él le respondió que la gente no ve a Dios porque Él es espíritu y, por lo tanto, invisible. Ella se entristeció con la respuesta y le reclamó cómo podía ser posible que él nunca lo hubiese visto dada su posición de sacerdote. Boff volvió a insistirle que ver a Dios es imposible. A lo que ella respondió:
Tú no ves a Dios, pero yo Lo veo todos los días. Cuando el sol se pone tras el horizonte, Dios pasa cubierto con un lindo y fantástico manto. Tiene un aspecto imponente, y tu padre que en paz descanse, que viene detrás, me mira, me sonríe y sigue su camino detrás de Dios. Yo Lo veo todos los días. (p. 78)
«¿Quién es aquí el teólogo: la analfabeta o el doctor en teología?» –se preguntó Boff. Puede verse este relato como una afirmación del punto que se discutía en el capítulo anterior que decía que hoy necesitamos gentes «que hablen a partir de Dios, que hablen a Dios» (p. 69). Cuando se encuentra gente así se debe aprender de ellas.
11. La espiritualidad en la carne cálida y mortal
La espiritualidad no es algo que posean únicamente las religiones, sino que es una dimensión fundamentalmente humana. Esta se muestra en nuestra capacidad de examinarnos interiormente y en actitudes fundamentadas en el amor. La espiritualidad crea en nosotros «unos valores por los que vale la pena que sacrifiquemos nuestro tiempo, nuestras energías y, en último término, hasta la propia vida» (p. 81). La práctica de la espiritualidad nos abre a una experiencia más profunda de la vida pues detrás de cada detalle hay significado.
Muchos problemas humanos surgen de una espiritualidad desatendida. El consumismo y el apego a cosas no esenciales han ocultado la llama sagrada que es la espiritualidad en el hombre posmoderno.
Finalizando el ensayo, Boff hace una reflexión sobre la Navidad como el acercamiento de Dios a nosotros en Jesús. Dios se hizo hombre y por ello compartió nuestros sufrimientos y nuestros esfuerzos. Gracias a lo que Jesús hizo afirmamos nuestra parte en la familia de Dios como hijos suyos.
Hay que sacar tiempo para la espiritualidad para vivir la transformación interior que se hablaba muy al principio. Esa espiritualidad nos dará la excusa para ser mejores humanos y nos dará tranquilidad en el caminar de la vida.