El ayuno (2)

Como preparación para el tiempo de Cuaresma, que comienza el 22 de febrero, estoy leyendo el libro Fasting de Scot McKnight. Espero que con estas reflexiones nos motivemos todos a hacer del ayuno una práctica habitual de nuestra devoción a Dios y de nuestro servicio al prójimo.

La Introducción del libro nos expone varias afirmaciones sobre el ayuno, desde tiempos del rey David hasta nuestros tiempos. Hoy le daremos una mirada al profeta Isaías.

Isaías: El ayuno como un acto para otros (p. XVI)

Toda persona que practica alguna disciplina espiritual tiene el riesgo de caer en el orgullo y creerse más espiritual que los demás. Podemos decir que esto ha sido un fenómeno general en la historia humana, por lo tanto también fue parte de la historia del pueblo de Israel. Es a este tipo de gente a la que el profeta Isaías se dirige.

5 ¿Creen que el ayuno que me agrada

consiste en afligirse,

en agachar la cabeza como un junco

y en acostarse con ásperas ropas sobre la ceniza?

¿Eso es lo que ustedes llaman “ayuno”,

y “día agradable al Señor”?

6 Pues no lo es.

El ayuno que a mí me agrada consiste en esto:

en que rompas las cadenas de la injusticia

y desates los nudos que aprietan el yugo;

en que dejes libres a los oprimidos

y acabes, en fin, con toda tiranía;

7 en que compartas tu pan con el hambriento

y recibas en tu casa al pobre sin techo;

en que vistas al que no tiene ropa

y no dejes de socorrer a tus semejantes. (Isaías 58:5-7)

Anteriormente hablábamos cómo David ayunó como respuesta a la enfermedad de sus enemigos. Para el profeta Isaías el ayuno no era un acto de quietud, sino un duelo que se manifestaba en acción al prójimo. Si el ayuno no llevaba a la compasión por otros entonces se deshacía antes de hacer su trabajo.

Para que el ayuno sea ayuno debe surgir de un dolor genuino, ya sea por una situación del prójimo o por el pecado propio. Ese dolor se debe transformar en acción piadosa y liberadora.

Preguntas para discutir:

– ¿Qué papel debe tener el ayuno dentro de la vida cristiana?

– ¿Cómo estamos ayunando?

– ¿Qué papel tendría la iglesia en la problemática social actual si adoptara la perspectiva de Isaías?